Ir a la cárcel: discutida sanción para los que cometen un delito. Normalmente asociado en nuestro medio con hacinamiento, pandillas internas, violencia, insalubridad, tanto así, que se les llama sarcásticamente "universidades de criminales".

Ir a la cárcel en Suecia... Las llaman "cárcel de paraíso" a algunas de ellas, y si se las compara con las de nuestros países, tienen toda la razón. Si bien en Suecia las prisiones tipo A de máxima seguridad son similares a las de otros países desarrollados, en éstas están muy pocos prisioneros, menos del 10%. Las demás, en especial las tipo F, -a las que irían por ejemplo quienes manejaren borrachos- son llamadas "open prisons", y abarcan al 25% de los prisioneros. De éstas, se puede salir, ir a clases, o incluso conseguir un trabajo.
Sin embargo, todas las prisiones de todo tipo, tienen muchas comodidades, en mayor o menor grado. Televisión, a veces con cable, celdas individuales, impecablemente limpias, con opción a visita conyugal en una suite privada dentro de la misma cárcel.
En cuanto a recreación, dependiendo del centro carcelario, existen múltiples opciones, desde la posibilidad de tomar prestados libros de las librerías municipales, juegos de pin pon o billar, lugares para acondicionamiento físico, canchas deportivas, y acceso a periódicos.
Además de asistencia médica y espiritual si se es creyente. No existen castigos como el confinamiento o similares, la sanción es el aumento del tiempo en prisión o la negación de la posibilidad de libertad condicional y de los días fuera, que consisten en que los presos por infracciones menores, y los presos al final de sus condenas, pueden salir de las prisiones y reportarse a ellas en X número de días.

Les dejo algunas fotos, así que ya saben queridos lectores, hasta para ir preso hay que tener suerte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario